La verdad es que su uso en Raspberry se hace bastante simple, siempre y cuando tengamos instalado su homólogo – es decir – el servidor VNC en el ordenador que deseemos controlar desde nuestra Raspi.
- Instalación del cliente VNC -
Para poder usar VNC la instalación no difiere con la de otros. Antes de instalar ejecutaremos la consabida
sudo apt-get update
y tras esto ya lanzamos el instalador propiamente dicho
sudo apt-get install xtightvncviewer
esperamos a que se instale y ¡listo!.
- Uso y opciones del cliente VNC -
Queda claro que el cliente VNC lo hemos de lanzar desde el entorno gráfico. Si no está este activo tan solo hemos de llamarlo desde el terminal con
startx
una vez abierto este, abriremos -valga la redundancia- un terminal en modo gráfico y desde él ejecutaremos el cliente contra la dirección IP (o el dominio) del ordenador que deseamos controlar remotamente.
Nota: el ordenador remoto debe estar corriendo el servidor VNC debidamente.
Supongamos (es un ejemplo) que nuestro ordenador remoto, al cual queremos acceder está en la IP (pública) 231.33.56.260 y bajo el dominio eldominio.com . En este caso, y sabiendo que el protocolo VNC accede típicamente por el puerto 5900 teclearemos
vncviewer 231.33.56.260:5900
o en su defecto
vncviewer eldominio.com:5900
tras lo cual, si toda ha ido OK, se nos pedirá la clave de acceso VNC del ordenador remoto. Se la introducimos y ¡voila! ya estamos manejando – en nuestro ejemplo un PC con Windows XP – desde nuestra Raspberry Pi.
Si, ya se que esta IP de ejemplo no existe … por cierto ¿ ves por qué? 
una vez dentro operaremos como si estuvieramos en el ordenador remoto.
Una única salvedad a comentar: ciertas teclas que pudieramos tener que enviar habrán de ser lanzadas de alguna otra manera, me explico, supongamos que para abortar un proceso en nuestro Windows remoto queremos acceder al administrador de tareas, y para ello no queda otra que pulsar las consabidas Ctrl-Alt-Del , pues en este caso nuestro pequeño cliente nos ofrece dicha opción pero pulsando la tecla F8 en nuestra Raspi. El menú emergente que aquí vemos lo dice todo.
Ahora … ¡ a divertirse remotamente !
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